En una cultura ampliamente digitalizada en la que basta «ver para creer», el sentido de la escucha corre el riesgo de atrofiarse y con él la percepción de uno mismo, de los demás, de la creación, de Dios. Hoy más que nunca conviene una gramática teológica que ayude a «escuchar para creer» en la Palabra de Dios y del ser humano. Como miembros de la Iglesia católica se precisa de una gramática teológica que ayude a ejercitar el oído a una escucha atenta, inteligente, reflexiva, afectiva, responsable, creyente y, por ende, un ejercicio cognitivo-espiritual que inhiba la escucha desatenta, superficial, imprudente, indolente, irresponsable e incrédula. Para todos en la Iglesia católica llegó el momento de hablar menos y escuchar más.
A partir del análisis de los escritos magisteriales del Papa Francisco, el presente estudio propone una gramática de la escucha teológica desde la cual estribar los vértices que concurren en la configuración de una nueva apologética. Esto significa que la presente gramática, en su perspectiva apologética, sólo se comprende si está al servicio del creyente. Precisamente, porque la gramática de la escucha teológica quiere ser una ayuda en la comprensión de la experiencia de fe vivida en una Iglesia de puertas abiertas. Ella desea ayudar para pensar la gratuidad responsable del don de su fe cristiana. En esencia, el programa de una original apologética teológica será relevante en la medida que ayude a crear las disposiciones para que el Evangelio sea escuchado por todos.